Pese a la mejora que destaca el conjunto de los exportadores uruguayos en la relación comercial conArgentina luego del cambio de gobierno, hay empresas locales que siguen con dificultades para colocar sus mercaderías en ese destino.
En diálogo con El Observador, el presidente de la Comisión de Comercio Exterior de la Cámara de Industrias (CIU), Rafael Sanguinetti, indicó que productos plásticos y metálicos que requieren licencias no automáticas han visto retrasado el ingreso a la vecina orilla. Según explicó, la aplicación de un tope impide a las empresas argentinas comprar por montos superiores a los del año pasado.
«Aparentemente hay un cupo (en dinero) que establece el gobierno argentino sobre todas las importaciones que tienen licencias no automáticas, en función de las importaciones del año pasado. Realmente es una pena porque fue un año (el pasado) muy restrictivo», dijo Sanguinetti.
El tema fue planteado el lunes al ministro de Relaciones Exteriores, Rodolfo Nin Novoa, durante un encuentro que el canciller mantuvo con autoridades de la cámara. El presidente de la CIU, Washington Corallo, dijo a El Observador que hay ciertos productos en donde Argentina «todavía quisiera tener algo así como una cuotificación». La gremial está recabando información específica de las empresas afectadas por una medida que no está documentada en ninguna resolución oficial, según se informó.
«Entendemos que esto sea tal vez hasta que Argentina vaya encauzando su propia gestión de comercio internacional. Pensamos que en el segundo semestre Argentina debería seguir recuperando terreno. A nivel de precios se está ajustando a la realidad, con lo cual los productos uruguayos podrían empezar a entrar más fácil en la medida que ese país adecue sus precios a los internacionales, especialmente en energía y otros insumos básicos», afirmó Corallo.
También el director nacional de Industria, Luis Heijo, hizo mención a la dificultad comercial ayer durante un foro de comercio bilateral con Argentina, en los salones de la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay.
El jerarca dijo que los operadores argentinos han comunicado que no puede cerrar negocios porque «tienen tope» para el monto que pueden importar. «No hemos encontrado ninguna reglamentación que establezca esto y, sin embargo, tenemos algunos exportadores que han denunciado esta situación», dijo.
Hasta fin del año pasado, el sistema vigente en Argentina para autorizar el ingreso de mercadería desde el exterior era el de las Declaraciones Juradas Anticipadas de Exportación (DJAI). Ese mecanismo fue sustituido por el Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI). Ese nuevo marco establece que los importadores argentinos deben presentar la información solicitada a través de la página de la AFIP.
El sistema mantiene las licencias automáticas que se otorgan en plazos de unos 10 días y las licencias no automáticas que salen en un plazo de entre 30 y 60 días dependiendo del producto y la certificación exigida, según Heijo.
Un monitoreo de la Unión de Exportadores del Uruguay a fin de marzo detectó que las licencias de carácter automático se estaban otorgando en plazos promedios de dos días y las no automáticas en un plazo de 10 días. En ese caso hubo demoras mayores al principio cuando comenzó a aplicarse el nuevo sistema por fallas de procedimiento del lado argentino.
Heijo dijo que el nuevo sistema está todavía «muy verde» para sacar conclusiones de cómo va a funcionar. De todas formas, valoró que tiene «reglas bastantes claras». «La percepción de los exportadores es positiva en general», afirmó.
En el período enero-abril de este año el mercado argentino fue el sexto destino para los bienes uruguayos, con colocaciones por US$ 116 millones, frente a US$ 130 millones de igual período del año pasado, según datos de la gremial de exportadores uruguayos.
Puerto recupera trasbordos
El presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Alberto Díaz, dijo ayer que el levantamiento de la medida dispuesta por Argentina que prohibía los trasbordos de mercaderías originarias de ese país en los puertos uruguayos ya tienen sus primeros efectos en la operativa de la terminal portuaria, con una recuperación progresiva de las cargas de fruta proveniente del sur.
Explicó que esa mercadería está volviendo por decisión de los productores argentinos y no de las navieras. «Hubo mala experiencia en algunos embarques con demoras en los puertos brasileros y eso hizo que el productor argentino decidiera volver a trasbordar en Uruguay, dijo Díaz. Sobre la llegada de cargas de productos congelados de origen argentino consideró que la oferta de servicio de frío en Montevideo «no está siendo atractiva» respecto a lo que ofrecen los puertos del sur de Brasil.
Ventas y captación de inversiones
En su presentación, Claudia Peisino, del departamento de Inteligencia Competitiva de Uruguay XXI, destacó que en lo que va del año hay productos farmacéuticos, de limpieza, lácteos y grasa de lana que han incrementando de forma significativa su ingreso a Argentina. También la industria citrícola logró colocar productos luego de cuatro años. Por otro lado, consideró que si bien Argentina será un competidor en la captación de inversiones, en el largo plazo el resultado podría ser positivo a partir de un «efecto derrame» en la región.
Fuente: El Observador.