Argentina eliminó los últimos vestigios del cepo cambiario

agosto 10 2016

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) derogó las últimas normas del cepo cambiario que aún estaban en vigencia, incluyendo los topes mensuales para operar en dólares, y sancionó un nuevo ordenamiento cuyo objetivo es simplificar el mercado de cambios, eliminar requisitos burocráticos y reducir los costos operativos para todos los actores del sistema.

La Comunicación A6037 de la entidad monetaria, difundida ayer, elimina la obligación de justificar con documentación cada operación de cambios. A partir de ahora, toda transacción con divisas en bancos y casas de cambio se procesará automáticamente. Quien la realice sólo tendrá que especificar, con carácter de declaración jurada, el concepto al que corresponde la operación (atesoramiento, comercio exterior, etc.), entre otros datos básicos.

También se derogan los topes mensuales para operar, aplicándose únicamente las disposiciones que limitan el uso de efectivo como parte de la política contra el lavado.

El gobierno aspira a que, con estas simplificaciones, desaparecerán los motivos para canalizar operaciones cambiarias por vías alternativas al mercado único y libre de cambios (como el «contado con liquidación»).

También se simplifica el nomenclador que detalla los motivos para los cuales se puede comprar o vender moneda extranjera. Hasta ahora sumaban 315 conceptos, y desde ayer se redujo esa cantidad a unos 70, de fácil interpretación. Este criterio va en línea con lo establecido por el Grupo de los 20 (G-20) en la materia.

Se permitirá también que la banca que opera por Internet y las casas de cambio elijan libremente el horario para operar.

El cambio normativo implementado por el BCRA incluyó la derogación de la Comunicación A4805, que limitaba la realización de operaciones de derivados con el exterior, negando la cobertura de riesgos a muchas compañías. En el caso de operaciones de entidades financieras, se establecen requisitos específicos, en línea con el criterio aplicado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el G-20.

El BCRA basó la necesidad del cambio en «la certeza de que la desburocratización del mercado de cambios ayudará al desarrollo del sector financiero y facilitará todas las actividades productivas vinculadas de una u otra manera a los mercados internacionales».

Fuente: El País.

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