Los martes y los miércoles pueden ser malos días para las empresas que transportan su mercadería en camiones en la ciudad de Buenos Aires y en el cono urbano bonaerense. Son los dos días más elegidos por las bandas de piratas del asfalto para sus golpes.
Y se trata de un delito que no cede en todo el país: cada 24 horas hay cuatro ataques a camiones. Se estima que la suma de todo lo robado alcanza unos 2000 millones de pesos al año.
El rubro más golpeado por la piratería del asfalto son las bebidas y los alimentos, sector que sufrió el 30% de los 1368 robos de camiones y camionetas en el país ocurridos entre agosto de 2014 y julio pasado. Le siguieron la industria textil, con un 22%, y en tercer lugar, las autopartes, 19%.
Así surge del último informe elaborado por la Mesa Interempresarial de Piratería del Asfalto, integrada por 80 empresas de la cadena de logística. El estudio, que fue hecho entre el 1° de agosto de 2014 y el 31 de julio pasado, revela que el 64% de los robos se produjo en el conurbano bonaerense; el 20 %, en la ciudad de Buenos Aires, y el 16 %, en el resto del país.
En los últimos tiempos se sumó otra modalidad a los robos de la mercadería en tránsito: el copamiento de las plantas de depósito o los centros de logística.
El viernes de la semana pasada un grupo comando armado con pistolas y ametralladoras, simulando ser operarios, copó un depósito de productos de electrónica en Monte Chingolo, en Lanús, y se hizo de un botín de 50.000.000 de pesos. No se trató de un hecho aislado, ya hubo otros casos similares (ver aparte).
«Son las mismas bandas de piratas del asfalto las que suelen copar los depósitos o los centros de logística. Un golpe planificado y sin contratiempos les genera un botín muy superior a lo que pueden hacer cuando roban un camión», explicó a LA NACION el abogado Gabriel Iezzi, de la Mesa Interempresarial de Piratería del Asfalto (www.pirateriadecamiones.com.ar ).
De los 1368 hechos de piratería del asfalto ocurridos entre el 1° de agosto de 2014 y el 31 de julio pasado, el 80% de los objetivos de los delincuentes fue mercadería transportada en camionetas. El 20% restante de los robos fue a camiones. «Si bien la modalidad de piratería del asfalto no aumentó de un año a otro y se puede hablar de una estabilidad en el delito, el último estudio sí demuestra un cambio de modalidad. Ahora, las bandas de ladrones apuntan a interceptar camionetas más chicas, como utilitarios, porque son las que transportan más mercaderías en los ámbitos urbanos», explicó Iezzi, quien ya hizo siete informes anuales junto con su socio Víctor Varone y en conjunto con las empresas de logística.
DELITO RÁPIDO
Con este diagnóstico coincidió el Coordinador de Seguridad de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac), Oscar Farinelli. «El robo de los vehículos utilitarios, que en su mayoría se da en la ciudad de Buenos Aires, es un delito más rápido que los golpes a los camiones. Una camioneta se intercepta, a las pocas cuadras se cambia la carga a un utilitario y los delincuentes escapan con tranquilidad», sostuvo el especialista.
Un ejemplo de esta modalidad se dio este mes cuando agentes de la Policía local del distrito de La Matanza recuperó un cargamento de zapatillas valuado en 360.000 pesos cuando dos delincuentes descargaban el botín que les habían robado a los empleados de una fábrica de calzado que circulaban en una camioneta Renault Master. Los ladrones, que se movilizaban en un vehículo Renault Kangoo, interceptaron a sus víctimas cuando empezaban el trabajo de reparto y las tuvieron cautivas hasta que las abandonaron en el barrio de Parque de los Patricios.
Hace poco tiempo, una fuente consultada por LA NACION había dicho que los piratas del asfalto llegaron a pagar 20.000 pesos por la información sobre la mercadería transportada y la ruta elegida. E Iezzi sostuvo: «No se roba un camión que no transporte menos de 250.000 pesos en mercadería».
Si se analizan los hechos de piratería del asfalto ocurridos en la ciudad de Buenos Aires, se puede decir que la zona caliente de este delito son los barrios de Nueva Pompeya, Parque de los Patricios y Villa Soldati, con el 35, el 32 y el 16% de los casos, respectivamente.
En el conurbano los puntos críticos son la zona sur y la zona oeste, donde se registraron el 43 y el 42% de los hechos delictivos, respectivamente. En la zona norte, en cambio, sólo sucedieron el 15% de los robos.
Fuente: LA NACION